La entrada de hoy se sale de mi linea habitual de publicación, pero puede que esto que vengo a contaros os haya pasado a mas de una. Tal vez sea el día, que lo tengo tonto, o simplemente que me hago mayor, pero desde hace unos años vivo con los sentimientos a flor de piel, con nada me emociono. Y para que mentiros, yo no soy así, o igual debería decir era, porque de un tiempo a esta parte, mas o menos desde que me quedé embarazada de Valkiria, me he vuelto una sentimental, sintiendo a cada momento el increíble poder de la emoción… blandita… muy blandita.
La mayoría de los que leéis este blog no me conocéis personalmente, pero si algún día nos llegáramos a conocer, veríais que soy una persona tímida, que me gusta disfrutar de mi espacio personal y no me gusta nada que me lo invadan porque si. Lo que viene siendo mantener las distancias. Habrá quien piense que soy fría o que quiero menos a la gente que me rodea que aquellos que se deshacen en mimos y muestras de cariño, pero ya os digo yo que no es así. Tan solo es que no me nace dar besos y abrazos a diestro y siniestro. No soy cariñosa, ni pegajosa. Mis amigos ya saben de que pie cojeo. Solo con mi marido y con mi hija soy todo lo contrario. Y durante gran parte de mi embarazo tuve cierto miedo a no saber ser lo suficientemente cariñosa con mi hija. Miedos de primeriza. ¡El amor de una madre esta por encima de todo!
Soy como soy, forma parte de mi y no me siento cómoda siendo de otra manera. Pero desde que me quedé embarazada algo cambió. De repente me volví emotiva, sentimental, hasta llegar a tener que dejar de ver las noticias porque era incapaz de acabar de verlas sin llorar a moco tendido. Tampoco puedo ver ya ninguna película o serie en la que algún niño sea maltratado o sufra. De hecho hace poco, viendo una famosa serie, había una secuencia en la que había un bebé al que iban a matar y simplemente lo pasé de largo. No puedo verlo, es superior a mi y mira que se que es ficción, pero aun así, no puedo.
Pensaréis que era una cosa de las hormonas. Yo también lo pensé. Pero no. ¡Nada de eso! El viaje hormonal pasó y toda esa emoción, esa nueva faceta sentimental, se quedó conmigo. Y que queréis que os diga… casi me gusta. Es curioso descubrir facetas nuevas de ti mismo a estas alturas de la vida.
Lo voy a tener que aceptar porque como digo creo que esto llegó para quedarse. No se si será cosa de la edad, o de que cuando te conviertes en madre algo cambia dentro de ti en ese sentido, pero ya voy camino de ser la típica que llora en cada celebración familiar y cada festival de colegio. Yo, que no lloré ni en mi boda, la semana pasada acabé con los ojos llenos de lagrimas mientras hacía de testigo en la boda de mi mejor amiga, ¡Una boda que ha duró 4 minutos de reloj! De verdad, con lo tranquila que yo iba, no se de donde ha venido esa ola de emoción incontrolable tan repentina.
Y esperaros, que en unos días es la graduación y el festival de fin de curso de Valkiria… ¡Vamos a salir de allí en canoa! ¡Lo veo! En fin, voy a aprender a vivir con este nuevo ramalazo sentimental que ha llegado a mi vida e incluso, porque no, a disfrutarlo. Porque a todos nos gusta que nos den cariño, pero no todos sabemos como darlo.
¿Os habéis vuelto mas sentimentales desde que sois madres?
¿Os puede el poder de la emoción?
8 Comentarios
Jo que bonito, yo soy llorona por naturaleza… y desde que vino Salvajita mas, que lloro por todo, que veo un dibujo triste y me dan ganas de abrazar la tele… Como dices habrá que vivir con esto. Un abrazo!!
Pues si, tendremos que vivir con esto, pero vamos, si tu ya lo eras de base, no me quiero imaginar como estas ahora, jajajjaa… Animo a las mamás blanditas!
Yo sigo igual, siempre he sido poco cariñosa!!! pero a mis niños los achucho todo lo que puedo!
Hombre, una madre no afectada por el sindrome de la ñoñez! jajajajaja… A ver, yo sigo siendo cara de tocar, jajaja, pero estoy mas blanda de lo habitual, jajajajaja
Totalmente.. Hay cosas que me llegan que antes no lo hacían, estoy más sensible y soy mucho más empática. La maternidad nos hace tontas eh? 😉
Un besote
La maternidad nos cambia, de eso no hay duda, pero bueno, que nos ponga un poco tontorronas tampoco esta mal, no? 😉
Besos!
a mi me pasa igual!!!! nos tendremos que acostumbrar a ello, porque yo antes tampoco era nada sensiblera,y tambien soy timida y amante de mi espacio personal 🙂 y ahora, hasta me sorprendo de la cantidad de lagrimisllas que se saltan por cualquier cosa!
La maternidad ha hecho estragos en nosotras… Mas nos vale acostumbrarnos… Y llevar kleenex! jajaja
Finalidad » Gestionar los comentarios.
Legitimación » Tu consentimiento.
Destinatarios »Los datos que me facilitas estarán ubicados en los servidores de Webempresa (proveedor de hosting de MaternidadComoPuedas) dentro de la UE. Ver política de privacidad de Webempresa. (https://www.webempresa.com/aviso-legal.html).
Derechos » Podrás ejercer tus derechos, entre otros, a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos.